El uso político del Aborto, ese tema que aflora periódicamente a la superficie como lo hace el Guadiana, puede llegar a ser como un cruel Monzón que inunda, anega y se lleva por delante mucho del trabajo hecho durante esos 4 años… y es que ‘no se lo van a creer …. pero esta es la opinión de una Loba como yo’!!
Por otra parte, el Aborto, pues ¿Qué decir del Aborto? Que es un tema recurrente para discutir-polemizar cada 4 años, un conflicto discursado acerca de la entelequia de que la buena moral se construye sobre programas electorales que cuestionen el binomio Mujer-Aborto. El uso político del Aborto, ese tema que aflora periódicamente a la superficie como lo hace el Guadiana, puede llegar a ser como un cruel Monzón que inunda, anega y se lleva por delante mucho del trabajo hecho durante esos 4 años.

Y es que, para las religiones y para muchos todavía impera la Cultura de la Tutorización de la Mujer. La Mujer es irresponsable, no sabe, desconoce su cuerpo y las consecuencias de sus actos. En la actualidad, para Occidente la ignorancia de la Mujer normalmente está relacionada con el sexo (práctica y consecuencias). En Oriente, en muchos países además de las cuestiones sexuales también lo son las intelectuales, y la particular interpretación del Corán hace que el estudio y formación de la Mujer también sea censurable, por consiguiente un atentado a la ‘Moral’ impuesta.

Bueno, pues ahora viene algo un poco delicado, si, y consiste en hablar sobre esos actos religiosos en los que participan los políticos (los que se dicen de derechas y también los de izquierdas), el ‘bajo palio’ algunxs no lo tenemos tan lejos en nuestra memoria. Actualmente el argumento que se esgrime es más moderno y entronca con la cultura y las tradiciones, y tal es la propaganda que cala profundamente en la cultura popular, y de este modo, el poder público sin ningún rubor participa en esos actos acompañando al otro gran poder: el religioso.

Y ahora mencionemos algo indecoroso, la doble moral de esta sociedad, por un lado condena el Aborto y por otro lado también la natalidad, bueno condena la natalidad conforme a los patrones de la jerarquía masculina, y es que hace apenas unos días el Registro Civil de Alicante impidió, a una madre biológica, registrar el bebé a su nombre. Bueno hay que explicar que se trata de una madre biológica que cedió su óvulo a su pareja de hecho para que ella llevase adelante la gestación. Y es que una pareja de hecho heterosexual no hubiese tenido problema en registrar al niño, pero una pareja lesbiana de hecho pues sí. El Registro Civil de Alicante sólo le permite adoptarlo y su pareja de hecho, la madre gestante, ha tenido que registrar al hijo común como madre soltera, así que las afectadas se han visto obligadas a presentar una queja por discriminación a la Conselleria de Justicia.
Pues eso, que algunos deseamos un estado laico en toda la extensión de la palabra, que las creencias y prácticas religiosas si se manifiestan públicamente queden ‘desafectadas’ del poder político. Por añadidura pedimos a los partidos políticos que se busquen otro tema para polemizar en las próximas elecciones, a ¿quién no le gustaría saber más sobre la vida sexual del escarabajo pelotero? y es que ‘no se lo van a creer …. pero esta es la opinión de una Loba como yo’!
